El destino de Tavo Pérez
El aún diputado local por el distrito de los Tuxtlas Octavio Pérez Garay, ha resultado uno de los congresistas más improductivos de esta legislatura que está por perecer.
Según datos duros y certeros, la gestión de Pérez Garay ha sido una de las más grises e intrascendentes dentro de este órgano colegiado, mismo que será catalogado como el más infame en la historia de Veracruz.
Tavo Pérez sin ningún logro legislativo considerable, concluirá su gestión quedándole a deber al estado y a sus paisanos.
Sin duda.
Como muchos más, el priista resultó ser un personaje empequeñecido, mediocre y entreguista, y en torno a la medianía de su labor, sólo se dedicó a aprobar diversas iniciativas legales por indicaciones del poder ejecutivo, afectando directamente a los veracruzanos, sin ni siquiera gestionar obras o acciones transcendentales para su distrito.
La mera verdad.
Octavio, aquel personaje que llegó al congreso gracias a las circunstancias políticas del pasado y al compadrazgo con Jorge Carvallo Delfín, a quién irónicamente después traicionó, le espera inequívocamente un futuro deslucido e incierto, ya que a medida de su inacción, será tratado por los ciudadanos con miras a sus triviales proyectos políticos futuros.
Tavo aún siendo uno de los peores diputados veracruzanos, sueña en convertirse en alcalde de San Andrés Tuxtla, pretendiendo emular a su padre Octavio Pérez González y a su madre Marina Garay Cabada, quienes ya fungieron como presidentes municipales, como si no hubiera otros activos más.
Incluso, politólogos veracruzanos señalan que sería más viable una nueva candidatura de la también ex diputada federal Marina Garay, que la de su hijo, un personaje que ha sido sitiado por la esterilidad política.
Pero esa, será otra historia.
Hay que decirlo, el aún legislador local ha sido medido y pesado, y tan solo con el hecho de ser un cómplice más de la prosperidad, votando a favor de todas las maniáticas propuestas legislativas que se crearon en el último ejercicio, lo ponen como un apestado entre los diferentes sectores de la sociedad.
En fin, a Tavo Pérez le espera un destino sombrío, y así como los ciudadanos veracruzanos castigaron en las urnas a un sistema estatal, este mismo fenómeno se repetirá a nivel local, y en el próximo proceso se duda mucho que todo lo que tenga la marca de este sexenio llegue a buen puerto.
Y si no, esperemos.
@IvanKalderon